El pasado 23 de agosto, el vibrante corazón de Núñez en Buenos Aires se llenó de poder y energía con la celebración del «Argentina Metal Fest», un evento que reunió a algunas de las bandas más emblemáticas del metal nacional. En el icónico local Golden Center, los fanáticos se congregaron para vivir una experiencia inolvidable, donde cada acorde resonaba con la pasión de quienes aman este género musical. Desde la entrada podías ver espacios para fotos temáticas, una extensa feria de mercadería metalera, un espacio muy cómodo y amplio en general, varias opciones para comer y beber, así como área de fumadores, patio, haciendo la experiencia bastante amena para asar todo un día en un festival.


Desde el primer riff hasta el último acorde, el festival se convirtió en una explosión de sonidos y emociones. Groover serían los encargados de abrir la noche, deslumbraron a la multitud con su potente actuación muy en la onda de los nuevos estilos y sonidos más modernos del metal agitaron lo suficiente para que la tarde explotara, mientras que Chowy Fernandez más adelante encendió el ambiente con su inconfundible estilo paseando entre progresivo, alternativo y un verdadero viaje musical que te va pasando muchos estilos, pero la progresión que los caracteriza jamás se pierde. Darlo Todo, con su energía inigualable, hizo vibrar las paredes del recinto, arrojando a todos a un torbellino de locura y entrega, sonidos influenciados por la escuela del metal core y por momentos new metal de la más vieja escuela, incluso versionarían a uno de los padres del estilo Korn.
La presentación de Nvlo, fue el punto más extremo del festival, la banda que viene destrozando escenarios y creciendo vertiginosamente impactaba en escena metal extremo de excelente ejecución, lograrían que explorara el pogo y la masa frenética empezara a hacer un gran rondo con un mosh alucinante. Por su parte, fueron un tributo a la destreza musical y la fuerza lírica que caracteriza al metal local a los legendarios Lörihen, con su sonido melódico y contundente, llevó al público a un viaje emocionante, mientras que Plan Cuatro y Cabezones bandas insignias del metal nacional mantuvieron la intensidad en el aire, haciendo que nadie se quedara quieto con sendas presentaciones, cabe destacar que muchos asistentes estaban por estas bandas no fueron para nada defraudados, más bien bastante complacidos.


La noche la cerraría Asspera y Horcas, ambos con un espectáculo increíble, primeramente, los Asspera con su espectáculo de metal bizarro lograron dar un show brutal de principio a fin, más tarde el cierre total del festival a cargo de las leyendas vivientes Horcas que repasaron gran parte de su discografía y lograron dar un memorable cierre a la noche. La complicidad entre las bandas y el público fue palpable, creando una atmósfera electrizante que solo el metal puede producir.
El «Argentina Metal Fest» no solo fue un gran homenaje al metal nacional, sino también a la comunidad que la sostiene. En cada grito y cada aplauso, quedó claro que el metal argentino sigue vivo y cada vez se va renovando y se mantiene entre generaciones, alrededor de unas 4000 personas se congregaron en este día dedicado a la música que amamos convergiendo entre edades y gustos lo cual hace que el género este más vivo que nunca. Ya está anunciado para 2026 la próxima edición de este festival y quedamos a la espera del miso. Gracias a la organización y la prensa Ay Música por la invitación. Salud y Metal.