El pasado 24 de mayo de 2025, la emblemática banda alemana de música gótica LACRIMOSA se presentó en el Teatro Flores de Floresta Buenos Aires, un evento que congregó a numerosos seguidores de la escena gótica y del rock oscuro. La atmósfera previa al concierto era palpable, con una multitud ansiosa por experimentar una noche llena de emociones intensas y melodías cautivadoras. Recordemos que la banda tenía más de 6 años sin pisar la Argentina.
La noche la abrió INAZULINA que ya es un clásico en los eventos de corte dark dentro del metal en Buenos Aires, formados en 2007 y activos desde ese momento, la banda ha logrado tener un gran avance y crecimiento dentro de la escena y ha venido con una gran seguidilla de shows donde han sido la banda soporte de numerosas bandas internacionales del género, esta noche irrumpían en escena haciendo explotar el Flores con gran fuerza y toda la oscuridad que siempre los caracteriza, grandes melodías y temas bastantes complejos que a la vez juegan con composiciones oscuras, muchas veces practicando casi que un estilo propio, lograron una presentación impecable y dejaron la mesa servida para lo que se venía.
Cercano de las 21 Horas era la hora del arribo al escenario de LACRIMOSA, el reconocido Tilo Wolff y su compañera de banda, Anne Nurmi, establecieron una conexión inmediata con la audiencia. Las luces se atenuaron y el primer acorde de «Avalon» y luego «Ich bin der brennende Komet» resonó en el teatro, y luego el super clásico «Der Morgen danach» provocando una ovación ensordecedora. La elección de estos tres temas para abrir el espectáculo fue acertada, ya que encapsula la esencia de la banda: una fusión de lírica poética con arreglos orquestales grandiosos.
A lo largo de la noche, la agrupación presentó un repertorio variado que incluyó clásicos como «Ich verlasse heut’ dein Herz», «Rote Sinfonie» y «Liebe über Leben», así como algunas de sus composiciones más recientes, lo que permitió a los asistentes apreciar la evolución musical del grupo. Cada canción fue acompañada por una producción visual que sumergió a la audiencia en un ambiente gótico, con proyecciones que complementaban perfectamente la narrativa melódica. Las pantallas mostraban imágenes en blanco y negro entre otros visuales, evocando una sensación de nostalgia y melancolía que es característica de sus letras.
Uno de los momentos más destacados de la velada fue la interpretación de «Durch Nacht und Flut». Este tema, conocido por su carga emocional, provocó una respuesta visceral en el público, que coreó cada palabra junto a Wolff. La entrega vocal de Anne Nurmi, sumada a la emotividad de Tilo, creó un momento culminante que permanecerá en la memoria de los asistentes. A través de su actuación, los fundados en «Frankfurt» lograron transmitir la profundidad de sus composiciones, llevando a la audiencia en un viaje introspectivo y catártico.
La producción del concierto estuvo a la altura de las expectativas. El sonido, impecable, permitió que cada instrumento se escuchara con claridad, realzando los matices de las composiciones de la banda. La escenografía, con su estética oscura y elementos dramáticos, complementó la propuesta musical, creando un entorno envolvente que transportó a los espectadores a un mundo alternativo.
Al finalizar el espectáculo, el público, aún bajo el hechizo de la música, brindó una ovación prolongada luego de «Metamorphobia» los alemanes ya no estaban en escena, y regresarían para finalizar la noche con «Stolzes Herz» del disco [Stille] y luego se despedirían del escenario con «Copycat» del gran disco [Inferno], dejando una huella imborrable en los corazones de quienes tuvieron el privilegio de asistir. La actuación no solo reafirmó la relevancia de la banda dentro del panorama musical gótico, sino que también solidificó el vínculo especial entre LACRIMOSA y sus seguidores argentinos.
Los alemanes dictaron catedra en la ciudad de Buenos Aires, lograron que fuese una experiencia inolvidable que combinó arte, emoción y una profunda conexión con la audiencia. La noche del 24 de mayo se inscribe como un capítulo memorable en la historia de la banda y en la memoria colectiva de sus fans. La espera por su próximo regreso comenzará desde ya, con la esperanza de que puedan repetir tan magnifica experiencia en un futuro cercano. Muchas gracias a Nwm y a la prensa Ay Música.